Ya en Mandelo, el lugar de peregrinaje de cualquier Guzzista. No es que yo sea muy dado a estos temas pero lo cierto es que uno se siente bien cuando aparca delante de la casa madre y deja aparcada lo que es en estos momentos la mejor moto moderna que haya fabricado Moto Guzzi.
No pude conseguir Hotel Parco Belvedere en Mandelo y tuve que irme a unos 12 kilómetros pero lo cierto es que ha sido un acierto. Un hotel de esos con encanto al lado del lago. Está un poco elevado y eso le da unas vistas increíbles. Incluso podéis cenar, muy bien de precio la verdad, y con vistas al lago.
Por cierto, el viaje de Grenoble a Pescate genial. Da gusto ir entre los Alpes en moto.
Y ahora unas fotos del museo Moto Guzzi
Y para terminar, una pizza como debe ser: