Pues al final madrugón tremendo y salida desde Madrid con destino Barcelona. No sin antes haberme desesperado la noche anterior haciendo las maletas de la moto. Al final cargado con una maleta de ropa, otra de comida y la tercera con chubasqueros, portátil, herramientas, zapatillas, etc… Realmente es increíble que he ocupado lo mismo que cuando vamos dos en la moto… ¡Qué pasa!
Salida perfecta con el frequito y con zonas hasta con doce grados, lo cual se agradece pero al llegar a Zaragoza me doy cuenta de que la luz de cruce no va. Primer susto al que después de buscar en «San Google» el taller al que ya fui una vez y llamada. Me acerco a Vian Motor y me arreglan la avería en menos de media hora. Por suerte tenían la bombilla y pude evitar tener que hacer llamadas buscando un taller de camino. Ya estaba pensando en irme hasta Italia para cambiarla pero no, Vian motor me ayudó a pesar de tener muchísimo trabajo. ¡Sin duda un diez para ellos!
Con el retraso encima, me decido por pegar el tirón y llegar casi hasta Francia. Y mira que casi lo consigo pero al llegar a Gerona estaba ya cansado y encontré un Hotel de carretera regentado por una señora amable y servicial que me hizo la estancia como si fuera mi propia casa. El Hotel se llama Sausa y tiene piscina, pista baloncesto, se come muy bien y barato… ideal.
No tengo fotos del hotel… lo siento pero llegué muy cansado.